¿Cómo es el perfil del turista tras el confinamiento?

El turismo es el motor de la economía de la mayoría de los países. Los turistas vienen dispuestas a dejar sus ahorros en el país de destino. De ahí la importancia de definir cómo es el pefil objetivo del turista, qué busca, qué desea, cuándo, cómo, dónde y por qué. Hemos de ser conscientes de que el perfil del turista de antes del confinamiento, no tiene nada que ver con el turista de hoy. Por ello, hemos de ser consecuentes, entenderlo, y ofrecerle lo que busca. Dentro de este perfil del turista, podemos encontrar varias subcategorías que tienen que ver con su valentía, su sensatez, su prudencia, sus fobias, y todo ello aderezado con el “shock” o impacto psicológico que le haya podido producir el encierro, la perdida de familiares y seres queridos, la perdida de trabajo, la falta de ejercicio, etc., etc. Cada persona somos un mundo, y nos enfrentamos a las circunstancias de la vida de forma muy distinta y sorpresiva. No es lo mismo haber estado, durante la pandemia, entubado en una UCI, que haciendo más o menos vida normal en casa, y saliendo al supermercado. Tras esta breve y necesaria introducción, hace apenas una semana, publicabamos los resultados de la primera encuesta relacionada con el turismo, en la que podemos comprobar que el Enoturismo se revela como una posible solución a la caída del turismo. En relación a esta “radiografía panorámica” del turista, podemos ofreceros estas interesantísimas conclusiones a la vista de los resultados que ofrece. Son las siguientes: 1.- Le apetece mucho hacer turismo, pero quiere ver opciones. Tan solo el 23,9% se muestran ser “valientes” frente al covid19, y no siente que le frene nada para hacer turismo tras el confinamiento. El 47,8% se muestra un poco menos valiente, porque su deseo se centra en analizar y valorar posibles opciones que tengan que ver con su salud. Para el 31 % restante, el turismo no es ahora su prioridad. 2.- Su deseo de hacer turismo es inmediato. El 57,6% desean salir del confinamiento para viajar. El resto muestran cautela, y por temas de trabajo, o por precaución, desean postergar el poder viajar. 3.- Prefiere hacer turismo en su propia comunidad autónoma. Tan solo el 35,3% desea viajar fuera de su comunidad de forma inmediata por placer o por ver a su familia. 4.- Busca el turismo rural, frente al turismo urbano, y al de sol y playa. El 67,8% de los encuestados así lo señalan. 5.- Se siente atraído por el enoturismo y/o ya lo practica. El 87,2% de los encuestados así lo demuestran. En cambio, no le da excesiva seguridad el enoturismo, ya que a tan solo el 29,1% le parece el turismo más saludable y más seguro. El 59,8% señala que “puede ser seguro y saludable”, pero su gran mayoría muestra dudas. Este elevado porcentaje de “dudosos” se debe a que las Bodegas no están haciendo correctamente su labor de informar y comunicar. Deberían explicar que ya están preparándose para la recepción de los enoturistas, dándoles seguridad con aspectos tales como “grupos reducidos”, “distancias de seguridad”, “mascarillas”, “guantes”, “geles hidroalcohólicos”, etc. Las bodegas cuentan con grandes espacios abiertos, capaces de dar más seguridad que la que tienen éstos cuando por ejemplo van al supermercado. 6.- Se siente tentado de ir de enoturismo, y almorzar en la bodega, catar sus vinos, y hacer alguna actividad de aventura. Ciertamente, son actividades que el confinamiento les ha impedido hacer, en estos días. 7.- Es un turista que en su gran mayoría toma decisiones de búsqueda de enoturismo en Internet, o preguntando a amigos y conocidos como segunda opción. Mayoritariamente usa la red social de facebook a diario, por lo que a las empresas relacionadas con el turismo les interesa hacer más fuerza comercial en este canal. Estos siete aspectos demuestran que el enoturismo es la opción, más deseable para los encuestados, pero como vemos queda aún mucho por hacer. La falta de comunicación de las bodegas mostrando las medidas y el protocolo de seguridad que han diseñado, dificulta en gran medida que los turistas se decanten por esta opción. Las bodegas, tras conocer el perfil del turista, han de comunicar urgente y eficazmente, que su turismo es:

– local, doméstico, rural, de proximidad, y con grandes espacios abiertos. – No cuenta con aglomeraciones ni bullicio. Las visitas de enoturismo se realizan con la necesaria distancia social, con medidas de seguridad, minimizando al máximo el riesgo de contagio y la carga vírica. – Cuentan con constatada limpieza. – El nivel de stress que se vive en la bodega es inexistente. Tan solo se respira silencio, paz y los aromas de una copa de vino, celebrando la salida del confinamiento, y estar vivos para poder contarlo.

Fotografía de enoturistas, en prestigiosa bodega española con mascarilla, y las adecuadas medidas de seguridad y salubridad.

Recomendamos, a los profesionales del turismo y del vino, inscribirse ya al Curso de gestión de Enoturismo + info aquí. Es un curso 100% online que no caduca. Permite ser estudiado al ritmo de cada uno. Tras el confinamiento, se organizarán diversos cursos semipresenciales entre los alumnos inscritos. En estos momentos de inactividad, interesa aprovechar el momento para estudiar, y salir al mercado del turismo o enoturismo, con más fuerza e ilusión. La tutora del Curso de Gestión de Enoturismo es D. ª Yolanda Fernández, Diplomada en Turismo por la UCM y Máster en Dirección de Empresas Turísticas y Comunicación Estratégica Empresarial. Podéis ver y disfrutar su reciente entrevista en Informativo matutino de Castilla-La Mancha Televisión del pasado día 15 de mayo, abogando por el enoturismo de las bodegas, como el turismo más seguro y saludable. Animamos a las Rutas del Vino, y diversas Asociaciones del sector a seguir los pasos de D. ª Yolanda Fernández, y dedicar sus esfuerzos en idéntica labor comunicativa, en pro del sector del enoturismo, y del turismo en general que reúna los necesarios requisitos de seguridad y salubridad, que reclaman los encuestados.